domingo, 21 de enero de 2018

Mosteiro de Sobrado dos Monxes. Mañana puede ser tarde.

Pintura mural del Monasterio de Santa María de Sobrado dos Monxes
Pintura mural del Monasterio de Santa María de Sobrado dos Monxes



Pintura mural del Monasterio de Santa María de Sobrado dos Monxes
Pintura mural del Monasterio de Santa María de Sobrado dos Monxes

Puede que la veas mejor si haces clic sobre la foto y luego pulsas F11.



Por mucho que presumamos de un agnosticismo a ultranza o de un laicismo militante, el reconocimiento de los monasterios medievales como únicos preservadores y transmisores de la cultura clásica heredada de las antiguas Grecia y Roma, no sólo es de la más elemental justicia, sino que es un hecho irrefutable. Nos gustará más o menos, pero la realidad es terca y ahí está por más que nos empeñemos en ignorarla o negarla.

A su vez, la Universidad, en el concepto moderno que de ella se tiene como entidad orgánica, surge en toda Europa allá por el lejano siglo XII y lo hace siempre en torno a los cabildos catedralicios y los monasterios de la Baja Edad Media; por lo que no resulta exagerado afirmar que éstos fueron la cuna donde creció nuestra cultura y civilización y la fuente nutricia del conocimiento actual, incluido el científico y técnico.

¿Qué hubo muchas sombras? ¡Pues claro! Pero también muchas luces. Toda obra humana está llena de luces y sombras, de grandes aciertos y tremendos errores y, si no fuera así, sería porque el hombre habría alcanzado la perfección absoluta en cuyo caso no habría razón de ser para agnósticos ni ateos porque el propio hombre sería el mismísimo Dios.

Así pues, cuando veo el deterioro y abandono en el que van cayendo muchos de estos lugares no puedo por menos que lamentarlo. Al igual que no puedo por menos que admirar a esos pocos monjes que aún quedan y  que con sus ya escasas fuerzas luchan diaria, pero inutilmente, para evitar lo inevitable.


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Texto tomado de: «Reflexiones de un Tarado».
Atribuido a: Miguel Arcángel de Vallejera y de Riofrío.



Johann Sebastian Bach — Tocata y fuga en re menor BWV 565 (fragmento).

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21 comentarios:

  1. Da pena verlas así. Y llegará lo inevitable. Ese es el gran error de los humanos, hacemos poco para salvar y preservar nuestra cultura.
    Besos.

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  2. Buenos encuadres Miguel. Buena denuncia. Como siempre el abandono y la dejadez, poco a poco se irán deteriorando y al final todo serán lamentaciones y culpas ajenas, suele ser por desgracia lo habitual.
    Un fuerte abrazo

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  3. Muy buenas tomas. Es una pena que todo esto se deteriore. ¡Lamentable!
    Un abrazo.

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  4. Las dos tomas son espectaculares y también muy tristes. Es increíble que ocurran cosas así, se gastan millones en chorradas y el patrimonio cultural desapareciendo.
    Un abrazo Miguel

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  5. Las pinturas bien restauradas, tendrían una buena visión...es lástima el maltrato que hacemos a nuestro patrimonio.

    Besos

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  6. Una reflexión, en imágenes y palabras, impecable Miguel

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  7. ·.
    No puedo estar en más acuerdo contigo. Me parece justo reconocer el papel desarrollado a lo largo de la historia en lo cultural.
    Las fotos-denuncia son un buen estímulo para que tomemos nota. El arte, por definición, es siempre un bien a conservar.
    Por cierto, siempre tuve ganas de conocer ese renombrado monasterio.

    Un abrazo, Miguel

    · LMA · & · CR ·

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  8. Estos murales no solo son una forma ornamental, fueron la manera de transmitir el conocimiento religioso a sus contemporáneos. La edad media, gris y oscura,... bueno, eso dicen, sin embargo sus iglesias y monasterios estaban llenos de colorido, tanto interior como exteriormente por mucho que se empeñen en mostrársenos como piedras grises.

    podi-.

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  9. Esas pinturas murales, desgraciadamente, ya nunca serán lo mismo, aunque quizás aún estemos a tiempo de hacer algo por ellas.
    Espero que no sea demasiado tarde.
    Un abrazo, Miguel.

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  10. Estupendas fotografías para mostrarnos el lamentable deterioro de esta obras de arte debido al paso del tiempo y sobre todo al abandono de quienes corresponda cuidarlas. Las fotos muy bien realizadas, Miguel, con unos encuadres muy bien cuidados.

    Saludos.

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  11. Bom dia, Miguel! duas obras que atravessam séculos, a enorme qualidade das obras tem conseguido a conservação das mesmas, é natural que ao longo dos muitos anos com a luz do dia e não só, as obras vão sofrendo alterações, a cultura está lá e vai continuar, mais tarde, certamente que as obras vão ser recuperadas.
    Parabéns pelo seu perfeito trabalho fotografico e boa semana,
    AG

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  12. Impresionante lugar e imágenes!!!...he visto las anteriores, unos blanco y negro llenos de encanto, como la de ese señor...buenísima!!!

    Un enorme abrazo, Miguel!!! ;)

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  13. Absolutamente de acuerdo, aunque seamos agnósticos o ateos (sin presumir de ello), los secretos que encierran monasterios y conventos medivales son una maravilla para los amantes de la história.
    Un abrazo Miguel

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  14. Mural paintings have very nice photo details.

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  15. A pesar de los pesares la fuerza que transmiten esas pinturas es tremenda.
    Para quedarse ahí, de pié o de rodillas, según cadacual, observándolas en todos sus detalles.

    Un abrazo

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  16. La cultura siempre tendría que ser reconocida y cuidada ... si queremos entender, un poco, nuestra historia, a la fuerza hemos de reparar en monasterios, iglesias...indistintamente de nuestras creencias religiosas..

    Un abrazo

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  17. Asombroso y asombrado por ese entierro de las ánimas. Las huellas culturales y etnológicas son extraordinarias.
    Me encanta los marcos naturales de las tomas. Qué buen gusto, Miguel
    Un abrazo

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  18. Sorprendente, me encanto, mucho Saludos

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  19. Siempre se iguala el Medievo con la negrura de la peste, la frialdad de la piedra de los castillos y la losa presente de la muerte. Pero, como bien dices, no todo son sombras. Es la época del nacimiento de las ciudades, del desarrollo del comercio, de la construcción de las grandes catedrales góticas y de la recuperación, poco a poco, de la cultura clásica. La decadencia va minando poco a poco los testimonios de aquel pasado glorioso.
    Un saludo

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