Cap. V.- Final en el Cerro del Carmen.

Casa del Doctor Julián Coronel Oyarvide - Samborondón.

Casa del Doctor Julián Coronel Oyarvide - Samborondón.

Casa del Doctor Julián Coronel Oyarvide - Samborondón.

Atardecer en el Río Guayas tras los cerros de Santa Ana y el Carmen.

Puede que la veas mejor si haces clic sobre la foto.

Siempre que cuento esta historia hay quienes se ríen y me miran pensando: «El abuelete ya esta gagá; otra de sus batallitas de viejo chiflado». Bueno ¿qué le voy a hacer?. Yo se bien lo que viví y, sí, ya me gustaría algún día poder contárselo a mis nietos aun a riesgo de que piensen que me falta un tornillo.

Me asomé por última vez a la ventana y comprobé como las palmas trataban de apoderarse de la estación fluvial del Daule. Bajé la escalera y, antes de subir al taxi que nos esperaba, volví la cabeza y vi como las ramas de los árboles buscaban ansiosas penetrar en la casa.

—Sé cómo se siente —dijo el taxista que habíamos contratado para todo el día—, por eso los llevaré a un lugar al que no suelo ir con desconocidos.

El Cementerio General de Guayaquil, bordeado por la calle del Doctor Julián Coronel Oyarvide, trepa por la ladera del Cerro del Carmen. Allí, en lo alto, mirando a poniente y semiescondida, hay una tumba.

Cuando el taxista nos la mostró me quedé de piedra. Bajo el altorrelieve de una hermosa y serena mujer de rasgos evidentemente nativos, la frente orlada por una corona de conchas y corales, se lee: «Ñusta Isaura Hermelinda Huaylas Caranquis y Huancavilcas Yupanqui. 1844 — 1885» e inmediatamente debajo: «Excmo. Sr. Agustín Rafael Soto del León y Val de Riofrío. 1839 — ¿?».

Tomé la cámara pero nuestro chofer y guía con un leve gesto me pidió que no. Con su gorra de visera en la mano, aquel hombretón curtido por el trabajo en la calle se mostraba emocionado mientras desgranaba una oración. Lo entendí, yo también  estaba sobrecogido ante aquel título de Ñusta y el segundo apellido del esposo zumbaba sin parar en mi cabeza.

Al despedirnos me dio su tarjeta por si algún día regreso a Guayaquil y, al verla, entendí algunas cosas. Su nombre es Oswaldo Kilovatio Laiqa Yungas y su padre trabajó toda la vida como operador de maquinaria pesada.

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Texto tomado de: "Guía de Viajes Reales y Soñados".

Autor: "Miguel Arcángel de Vallejera y de Riofrío".

Nota: Aquí debería decir que todos los personajes son de ficción y que cualquier parecido con la realidad no es más que una mera coincidencia. En todo caso, si te crees la historia, dale un «Like» en FaceBook y, si no te la crees, escribe «Amen» y dale a «Compartir». Al fin y al cabo ambas opciones son tuyas.

NOTA: Esta serie, ambientada en Guayaquil (Ecuador) cuenta, a modo de relato fotográfico, con cinco capítulos y un prólogo cuyos enlaces son los siguientes:

• Prólogo - Atardecer en el río Guayas.
• Cap. I.- El Vigía del Daule.
• Cap. II.- Samborondón.
• Cap. III.- La Complicidad de los Espejos.
• Cap. IV.- Retrato en un Retrato.
• Cap. V.- Final en el Cerro del Carmen.

Ludwig van Beethoven - "Claro de luna" (Sonata para piano n.º 14)

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