Violinista en la Plaza del Obradoiro. |
Puede que la veas mejor si haces clic sobre la foto y luego pulsas F11.
Desde aquella ocasión en Santurce, siempre que veo un músico en la calle me fijo y, en efecto, puede que el fotógrafo loco tuviera razón y que la música realmente suene en los ojos. ¿Qué es un despropósito? Sí, ya lo se; pero alguna relación hay entre ambas cosas que a mi —¡pobre ignorante!— se me escapa.
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Texto tomado de: "Diálogos y Monólogos".
Autor: Atribuido a "Miguel Arcángel de Vallejera y de Riofrío".
Csárdás (Vittorio Monti) - Clara Cernat and Thierry Huillet.
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Hello Miguel!
ResponderEliminarI admire your photos. They are always excellent, it's also.
Greetings from Poland.
Lucja
Man enriches the civilization of the street.
ResponderEliminarEste violinista y todos los músicos que tocan en las calles lo hacen con profunda pasión, y muchas veces los transeúntes ni siquiera nos percatamos de ello. La foto es fenomenal.
ResponderEliminarUn saludo.
Hay verdaderos artistas en nuestras calles, esperando una oportunidad.
ResponderEliminarSi cierro los ojos podría venirme la imagen de mi padre, que tantas veces tocaba en la casa esta preciosa melodía.
No es un simple retrato lo que hoy nos has mostrado, en él se ve reflejada este alma de artista y su pasión por la música.
Besos
Yo creo que la música suena en los cinco sentidos, incluso cuando falta alguno de ellos y si no que se lo digan a Beethoven.
ResponderEliminarUn buen retrato de calle.
Buen retrato Miguel, la música cuando se vive suena en todos los poros.
ResponderEliminarUn abrazo
Eso es poner todos los sentidos en lo que se hace.
ResponderEliminarpodi-.
Nice to have you back, Miguel! A very powerful portrait of a street musician who plays violin.
ResponderEliminarExcellent photograph and it has a soul!
A hug.
Buen trabajo Miguel, me gusta especialmente la composición que forma una te al cruzarse el arco con el instrumento.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es probable que se trate de un virtuoso que no tiene un lugar más adecuado donde expresar su arte, como ocurre en tantas profesiones. No se si de los ojos, pero desde luego desde el corazón sí que debe brotar la buena música.
ResponderEliminarUn abrazo.
Algunos de estos músicos callejeros son unos auténticos artista. Lo has captado en plena concentración en un buen retrato.
ResponderEliminarSaludos.
Me encantan los artistas callejeros. Soy muy fan. Hay una nobleza y una valentía en ellos... La foto es muy chula, porque parece que el músico, con total humildad le concediera todo el protagonista a su instrumento.
ResponderEliminarUn abrazo, Miguel
Las notas salidas de ese violín inundan la habitación en la que me encuentro. ¿Producto de mi imaginación?
ResponderEliminarUn saludo
La crisis en muchos países, sobre todo del este de Europa, ha llevado a grandes intérpretes a buscarse la vida en las calles de las grandes ciudades, realizando auténticos conciertos al aire libre.
ResponderEliminarMe gusta la suavidad del blanco y negro y esa postura con aire de quien domina la técnica.
Feliz semana, Miguel.
Me gustan muchos las fotografías de los músicos callejeros por la fuerza que tienen y por su expresividad y más en BN. Muy buena Miguel!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Great photo of the violinist, well taken Miguel.
ResponderEliminarBuena fotografía, siempre con ese
ResponderEliminarestupendo B&N.
Saludos.
Bonito retrato con un expresión muy peculiar del violinista.
ResponderEliminarUn abrazo.
Los músicos de calle pueden llegar a dar unos excelentes resultados fotográfiicos. Tu le has sacado todo el jugo al momento.
ResponderEliminarUn abrazo Miguel
Excelente toma callejera.
ResponderEliminarFotogràficamente tiene una gran belleza, las diagonales del arco y del violin acompañan la mirada hasta el protagonista, concentrado en la música.
Un abrazo.
Gran imagen . Seguro que sonaba más celestial junto al obradoiro. Sus manos aportan líneas de fuerza visuales magníficas
ResponderEliminarUn abrazo, Miguel