Detalles de la Escultura de Francisco Pérez Porto dedicada a la Pardela Cincenta, Embajadora de Oleiros. |
-Cuentan, meu fillo, que hubo una vez un municipio galego tan importante, tan importante, que incluso se permitía el lujo de tener una embajadora plenipotenciaria por todo el mundo mundial. Claro que, para ahorrarse unos cartiños, nombraron embajadora a una gaviota pardela a la que llamaban Cincenta.
-Cincenta todos los veranos tomaba vacaciones, hacía sus maletas y, sin importarle audiencias ni labores consulares, volaba hasta su pueblo donde se alojaba gratis en el mejor hotel y pasaba el día en la recepción confraternizando con los viajeros. Y es que ella, cuestiones de su oficio, estaba muy curtida en el mundillo ese de las recepciones.
-Un buen día Cincenta no llegó. La Corporación Municipal en pleno y los vecinos se preguntaron ¿qué habrá pasado? y, como por su edad cabía suponer lo peor, la dieron por desaparecida y, en la isla del castillo, elevaron un monumento en su honor. La escultura está formada por seres de agua y de viento que se elevan hasta el cielo donde ella alza el vuelo. Chiquitita, muy pequerrechiña ela, pero pardela Cincenta al fin y al cabo.
-Avó, eso que dices han ser contos.
-Non, meu fillo, por éstas que todo lo que digo es cierto -dijo el abuelo y, mientras hablaba, cruzo el índice sobre el pulgar y estampó un sonoro beso-.
Texto tomado de: "Guia de Viajes Reales y Soñados", capítulo trigésimo nono, dedicado a O Porto de Santa Cruz - Oleiros (A Coruña).
Mayoritariamente atribuido a: Miguel Arcángel de Vallejera y de Riofrío.
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NOTA: Para dejar constancia de que, en esta ocasión, he podido corroborar la realidad del relato del iluminado cuyos libros utilizo para apoyar mis fotografías con tanta frecuencia. Prueba de ello es el enlace que he dejado en el propio texto.
ResponderEliminarQue buena entrada!!! Me ha encantado el texto y las fotos son un lujo.
ResponderEliminarUna fotos llenas de colorido, como creo que se merecian Cincenta y todos los pobladores del municipio. Abrazos.
ResponderEliminarPure photography.
ResponderEliminarHola. Sus obras es magnífica.
ResponderEliminarSaludos desde Japón. ruma
Las fotos son estupendas Miguel que unido a la historia y al texto hacen una entrada magnífica.
ResponderEliminarUn abrazo
Buen trabajo Miguel. El texto es divino y tu trabajo fotográfico de primera. Un abrazo chaval
ResponderEliminarMe encantan esas leyendas.
ResponderEliminarLas imagenes son extraordinárias tanto por su colorido como por su definición.
Un fuerte abrazo Miguel
En este caso, Josep, no es una leyenda. Yo conocí a la pardela cincenta que durante 15 años al menos venía todos los veranos y se alojaba en el Hotel Portocobo, donde paseaba con total desparpajo por la recepción, salones etc. y confraternizaba con todo aquel que quisiera acercarse a ella.
EliminarEl nombramiento como Embajadora Honoraria es igualmente cierto y se llevó a cabo por el Ministerio de Asuntos Exteriores.
Gracias y un abrazo,
Estupendo trabajo, con una gran historia.....ya me gustaría viajar cómo ella, sin coste alguno...creo que también me esmeraría en hacer una buena labor de relaciones públicas.
ResponderEliminarBesos
Art relaxing, beautifully colored, pleasant to behold.
ResponderEliminarUnas fotos muy detallistas, con unas texturas y colores muy bien conseguidos.
ResponderEliminarSaludos.
Bonita historia, bonita por el hecho que un pueblo recuerde un "simple" animal, al igual que Rufo en Oviedo y otros tantos de los que no habré tenido nunca noticia. Alguien insignificante que figuró en los corazoncitos de muchos de sus "conciudadanos".
ResponderEliminarpodi-.
Un 4D lleno de colorido y metáforas.
ResponderEliminarComo en el medievo, enseñando con relieves la historia. Genial colorido e historia.
Un abrazo
Very creative photos!!! Little fragments/stories from the ancient time are very captivating. The artist is very talented and very original.
ResponderEliminarBest wishes to you.
Obras de arte fotografadas por um artista digital.
ResponderEliminarMaravilha de postagem amigo Miguel. Abrazo
Una historia preciosa.
ResponderEliminarY muy bonitos los detalles de esa escultura.
Enhorabuena por todo, Miguel.
Un abrazo.
La pardela es una maravilla.Muchas he visto durante este Camino entre Muxía y Fisterra.
Las fotos de la escultura... llenas de color y alegría.
El cuento es tierno y hermoso. Es una suerte que esté atribuido a un tal Miguel... mira que coincidencia !!!
Un abrazo
· LMA · & · CR ·
Que bonita historia!!.. Y estas esculturas son de curiosas formas y colores...Precioso detalle :)
ResponderEliminarPreciosa historia, tanto como el color que tan bien has captado.
ResponderEliminarBoa tarde, amigo Miguel! foto historia bem conseguida e bem partilhada, é sempre com muito prazer que aprecio o seu belo trabalho.
ResponderEliminarAG
A los descendientes de Cincenta les gustara esta escultura.Preciosas fotos Miguel y bonito relato.
ResponderEliminarUn beso.
Miguel,
ResponderEliminarmuchas gracias por su visita y comentario.
Saludos.
Muy buen trabajo, todas muy buenas y la primera en especial con una enorme nitidez que parece poder tocarse, saludos.
ResponderEliminarMuy bonita entrada,llena de color,y la historia que le acompaña no es menos!
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