Los efectos del verano. |
Puede que la veas mejor si haces clic sobre la foto y luego pulsas F11.
Si de algo nunca tuvo dudas Adelaida Eugenia es de su exuberante belleza pues ya desde chiquita, a la hora del baño, su abuelita repetía como una cantinela aquello de «mírala, mujer, mírala qué hermosa se está criando», a lo que su mamá, arrobada, contestaba «y es tan rubia y blanquita...».
Con el paso de los años Adelaida Eugenia, no sólo creció en hermosura, sino también en bondad, santidad y amor al prójimo. Por eso, consciente de que en aquella tierra de gentes quemadas por el sol su blancura inmaculada y la tersura de su piel causaban admiración y consuelo —¡Santa mujer ella!— tan pronto como el verano hacía su aparición y quedaban atrás los rigores del invierno, sin dejar de lado el estudio de las vidas ejemplares de los santos, se ponía al sol dejando al descubierto tanta cantidad de piel como el decoro y la rígida educación que había recibido permitían.
Cuenta don Romualdo, su párroco y confesor, que como máxima expresión de su entrega a los demás repetía esta jaculatoria con gran fervor: «Señor, Señor, lo que se han de comer los gusanos, que lo gocen los ojos de los humanos; por Tu infinita misericordia, amen».
Cuenta don Romualdo, su párroco y confesor, que como máxima expresión de su entrega a los demás repetía esta jaculatoria con gran fervor: «Señor, Señor, lo que se han de comer los gusanos, que lo gocen los ojos de los humanos; por Tu infinita misericordia, amen».
Pronto una corte de fieles seguidores se fue reuniendo a diario para rendirle grandes muestras de devota admiración, hasta el punto de que un obispo llegado desde la Casa de La Troya, que al parecer es un palacio situado en un lejano país poblado de palmeras, la declaró santa bajo la advocación de Santa Adelaida Eugenia de la Blanca Piel, fijando como día de su celebración el 21 de junio, coincidiendo con la entrada del verano en el hemisferio boreal.
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Texto: «Vida y Milagros de Santos Alternativos».
Autor: Miguel Arcángel de Vallejera y de Riofrío.
NOTA: Últimamente estoy muy ocupado por lo que, aparte de no poder comentar en los blogs de los amigos, tampoco puedo publicar más que así, apareciendo y desapareciendo como los ojos del Guadiana. Espero ir recobrando la normalidad y volver a la regularidad acostumbrada. Un abrazo para todos aquellos que sigo y que me siguen.
Schubert - Serenade.
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Agradezcámosle al verano y sus efectos tu retorno con imágenes tan buenas y sugerentes como siemprs
ResponderEliminarMagnificas la imagen y el relato, el verano es lo que trae, todos buscamos como estar más frescos.
ResponderEliminarSiempre gracias por tus sensacionales imágenes.
Un fuerte abrazo Miguel
Magnifica fotografía que hace honor al relato. Y que inteligentes son los obispos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yes, summer becomes hot.
ResponderEliminarEl verano es generoso, y la santidad a veces encuentra caminos inescrutables.
ResponderEliminar¡Grande, Miguel!
Un buen retrato para tan extraordinaria fotografía. Ignoro donde has tomado la imgen, pero creo que no debe de hacer más calor que en Córdoba....no me quiero ni imaginar como estaría sentada, si viniera hasta aquí en uno de esos días que se superan con crece los 40º.
ResponderEliminarBesos
CIERTAMENTE LA PIEL NECESITA TRANSPIRAR Y BAJAR LA TEMPERATURA CORPORA, INCLUSO EN SANTIAGO DE COMPOSTELA.
ResponderEliminarUN ABRAZO.
Aunqué sea espeorádicamente es un auténtico placer volverte a ver. Yo estaré unos dias de descanso peró he dejado unos cuantos posts programados.
ResponderEliminarHasta la vuelta.
Un fuerte abrazo Miguel
Jeje! El relato es tremendo y la foto es más que apropiada...
ResponderEliminarMe alegro de "verte", buen verano amigo Luis
Un abrazo
La imagen es colosal, Miguel...Me encanta!
ResponderEliminarUn abrazo.
Sugestiva imagen y divertido texto...nadie podrá negar los calores del verano...
ResponderEliminarTranquilo por las visitas...déjate ver de tanto en tanto y ya está
Un abrazo
Que esa mujer busque una sombra por dios!!.. Por lo demàs,no te preocupes tu ya sabes com es esto,lo importante es que estes bien.. Un abrazo y feliz verano :)
ResponderEliminarBuena toma estival, Miguel...a la chica la captaste muy "veraniega.
ResponderEliminarSaludos.
En verano cuanto más fresquitos mejor. La foto es estupenda Miguel.
ResponderEliminarUn saludo.
¡Hola Miguel!, una foto magnifica!!, sabiendo sacar la riqueza
ResponderEliminarde la piedra y de tú B&N.
Quedo muy agradecido por tus palabras de ánimos, gracias.
Abrazos.
Espectacular escena, amigo... Muy buena imagen
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